Luego de ocho meses, regresó el público al freestyle. En Lima, Perú, nadie pensaba que aquel 7 de marzo sería la última vez que el espectador pudiera celebrar rimas, pues la pandemia por el COVID-19 cayó como un balde de agua fría; esta enfermedad le quitó al mundo una de sus actividades favoritas en habla hispana: el estilo libre, que, sin duda alguna, ha tomado un gran auge en tiempos recientes.
Pero retornó el aficionado del freestyle al escenario, dejaron atrás los gritos virtuales, desde casa, para gritar en el recinto ante sus competidores predilectos. En México, en el inicio de noviembre, se marcó un hecho histórico ya que fue la FMS México la primera de las cinco ligas en contar con público.

RC vs Yoiker. FMS México 2020 J3. PH: @todosflotanpro
Con el regreso del respetable, los MC’s tendrían otra actitud, otro modo de competir. La repercusión en éstos podría ser notoria, pero algunos se mantuvieron estoicos y lejos de cambiar su estilo fueron fiel al suyo.
Esto también se acuña a la cantidad de espectadores que hubo, no los suficientes para generar la ola de ruido ya conocida, pero sí para intervenir en momentos oportunos, sobre todo en a capella.
Un ejemplo de ello fue en la batalla entre Lobo Estepario y Potencia. Aun con la base puesta se pudo escuchar el rugir de la gente, pero los freestylers continuaron en su papel, no se distrajeron. Su mayor participación se dio sin el beat, enardeciendo más, en el buen sentido de la palabra, a los competidores, motivándolos.
Después de la fecha 3 de la FMS México puede existir un precedente para las demás ligas de estilo libre. La intervención del público, al ser poco espectador, no generó demasiada influencia en el freestyler, aunque sí lo motivó. No saca de su proceso mental al competidor, ni le genera expectativas negativas.
El público forma parte esencial del freestyle, pero ante la pandemia ha generado una “nueva normalidad”, disminuyendo su presencia en las batallas. Hoy, ante su regreso, vemos un público que claramente extrañaba el ambiente de rimas y procesos mentales complejos, un espectador más consciente de su papel con intervenciones oportunas.
Artículo redactado por José Acosta, miembro de la Urban Roosters Army.