Por: Adrián Ruiz (@adr1_98)
Se acabó. Tras un largo y apasionante recorrido, la FMS España pone punto y final a su quinta temporada. Su última batalla, el Chuty vs Gazir, fue la guinda a una liga de ensueño, en la que no faltó tensión, magia y, sobre todo, freestyle. Finalmente, el asturiano derrocó al tricampeón nacional y logró hacerse con el ansiado título de campeón. Sin embargo, aún quedan muchos datos por analizar de esa batalla. A continuación, conoceremos el trasfondo de la final, aquellos datos que, tres días después, aún no han visto la luz.

Adentrándonos en las entrañas del formato, comenzaremos a observar cómo fue el desempeño de ambos durante las primeras rondas del enfrentamiento. Chuty comenzó dominando la batalla. Era consciente de que llegar a una réplica contra Gazir suponía jugarse el título al 50%. No quería que una larga temporada se decidiera en 120 segundos y salió a ganar desde el principio. Ese inicio fulgurante se vio reflejado en el Easy y en el Hard Mode, donde fue superior a su rival. Chuty obtuvo un total de 59,5 y 61 puntos respectivamente, por los 52,5 y 56 de Gazir.
Llegaron las temáticas y, en ellas, Gazir contrarrestó, levemente, el inicio apisonador del madrileño. Entre las dos temáticas el asturiano sumó 80,5 puntos, un punto y medio más que su rival. Este punto y medio fue devuelto por Chuty en la siguiente ronda, un Kick Back en el que predominaron las respuestas al momento. De esta manera, el madrileño conseguía un total de 64 puntos frente a los 62,5 de Gazir.

A continuación llegaron los minutos libres, una de las rondas más amadas del formato. Con Gazir en ligera desventaja, Chuty intentó dar la puntilla a su rival. Tras un minuto de ataque del asturiano en el que logró 63,5 puntos, Chuty consiguió 84,5 puntos en el de respuesta. Con esta ventaja, comenzó el madrileño su minuto de ataque. Su precisión y personalización le hicieron obtener una gran marca (72 puntos). En este momento, Gazir se veía en la necesidad de realizar un minuto de respuesta sublime para recortar distancia al tricampeón. Y lo hizo. Tras responder prácticamente a todo, el «niño diabólico» logró una puntuación de 99, equilibrando prácticamente la batalla.
Tras un a capela donde la igualdad fue la tónica predominante (ambos obtuvieron 30 puntos), se llegó a un 4×4 que podría haber sido definitorio, pero no fue así. Gazir obtuvo 72 puntos frente a los 67,5 y, de esta manera, contrarrestó el buen inicio de su rival y logró forzar una réplica en la que se decidiría el título.
En ella, Gazir fue más conciso y constante, hecho que le permitió salir vencedor. Los cinco jurados señalaron al asturiano y el resto, es historia. Gazir logró derrocar al rey, al tricampeón de FMS España, y se desquitó del mal sabor de boca de la final contra Bnet el año anterior.
De esta manera, tras haber sido campeón del mundo, Gazir fue coronado como campeón de España en lo que fue, posiblemente, una de las mejores batallas de la historia. Qué bonito es el freestyle.