Por Santiago Orellana.
El pasado domingo 29 de julio, Killo ganó la BDM regional Tierra del Fuego en una fecha repleta tanto de competidores locales como de zonas aledañas.
La foto final del evento con el campeón y la organización.
El torneo contó con 9 competidores de Rio Grande, 4 de Ushuaia y 3 de Rio Gallegos. Todas ciudades cercanas a la provincia de Tierra del Fuego, salvo por Ushuaia que es la capital.
Una vez iniciada la competencia, las llaves de octavos de final quedaron conformadas de la siguiente manera:
OCN vs. Bazzer
Talah vs. JS
Clandestino vs. Maflow
Killo vs. Pato
Kito vs. Kenai
Dibu vs. Yiago
Primo vs. Lepera
Apolo vs. Jujuy
En primera ronda, Killo enfrentó a Pato, uno de los competidores de Ushuaia. Al cual venció sin muchos problemas para avanzar a la siguiente ronda. A la misma avanzaría junto con OCN, Talah, Kito, Dibu, Lepera, Apolo y Maflow.
Killo (izquierda) vs. Pato (derecha) en octavos de final. PH: @francojaramillofotografias
Ya en cuartos de final, llegaba el turno de enfrentar a Maflow, competidor de Rio Grande, que venía de vencer a Clandestino en octavos. La batalla fue pareja, pero Killo avanzaría justamente a semifinales.
Con el pase a semis, las rondas decisivas quedaron de la siguiente manera:
Talah vs. Killo
Kito vs. Lepera
Maflow (izquierda) vs. Killo (derecha) en cuartos de final. PH: @francojaramillofotografias
En la ronda previa a la final, Killo enfrentó a Talah, el freestyler de Ushuaia, al cual pudo vencer y así luchar por el cupo nacional que otorgaba la competencia al campeón.
Finalmente, tras vencer a Lepera en la final, Killo se llevó la regional y con ella el pasaje directo a la BDM Gold Argentina que se llevará a cabo en la provincia de Mendoza en el mes de octubre.
Batalla de Maestros está en el rango 2 de competencias que suman puntos para el ranking de ascenso.
Con la victoria, el campeón es el octavo competidor clasificado para la nacional y estará en busca de los 20.000 puntos que otorga la FRF para el ranking de ascenso. El sur argentino tiene representante… ¡Grande, Killo!