¿Cómo entrenas para las competiciones?
Mi entrenamiento es hacer freestyle cuando y donde me apetece. La filosofía es la misma de siempre, muy tranquilo y a hacer lo mío.
¿Tu objetivo es ganar?
Mis objetivos realmente nunca son ganar. Obviamente prefiero ganar, pero mi objetivo está en mi contenido y en lo que hago, en cómo ejecuto la acción y en cómo hago freestyle. Estar contento con mi actuación y volver contento a casa.
¿Consideras que estás en tu mejor momento?
En batallas y en lo que el público ve diría que sí. Mi mejor nivel lo encuentro con mi gente o yo solo, que es lo que más me gusta. Intento llevar eso que sé hacer en la calle a un escenario. Entonces, probablemente lo que estéis viendo sea mi mejor nivel de lo que está grabado pero para nada es lo que a mí me gusta hacer de verdad.
¿Hay alguna competición a la que no quieras asistir?
No querer asistir como tal, no. Sí que es cierto que este año no me veía compitiendo en la final nacional de Batalla de los Gallos y el año que viene no lo sé. Aunque si me llamaran para la internacional me costaría decir que no porque me quedé con la espina.
Personalmente, ¿cómo estás llevando el gran fenómeno de las batallas?
Bien, son cosas que no me afectan mucho ya que intento que no me dispersen. Al fin y al cabo vengo aquí, cumplo con mi trabajo, hago lo que me gusta. Sé que el evento tiene repercusión pero cuando llego al barrio desconecto haciendo las mismas cosas de siempre con la misma gente.
Bnet haciendo magia sobre el escenario.
¿Cuál ha sido la mejor experiencia que has vivido gracias al freestyle?
Prácticamente todo lo vivido ha merecido la pena, sobre todo por la gente que he conocido, amigos que me he llevado y por todos los viajes. Al final, en cada evento la gente solo ve las batallas, pero por detrás hay varios días previos en los cuales te relacionas con gente nueva y te llevas una experiencia increíble. Tan solo por ello vale pena todo esto.
Si tuvieses la oportunidad, ¿qué te gustaría aportar y eliminar del mundo de las batallas?
Me gustaría mucho que el público tuviera algo más de interés por el rap y eliminaría, sobre todo en España, ese componente tan futbolístico de rivalidad. Que si ganas, alguien se cabrea y te hatea o todo el mundo se te echa encima. Me gustaría que todo fuese con una mentalidad más sana, venir a disfrutar y que el resultado no sea tan importante.
¿Consideras que tanta fama alrededor del freestyle puede llegar a perjudicar el movimiento?
Es lo que es. No puedes elegir lo que le gusta a la gente o no. Por ejemplo, en Argentina todo esto tiene muchísimo tirón pero no creo que sea malo. Hay un ambiente constructivo y productivo de cara a la cultura del freestyle.
Y por último, ¿qué le dirías a alguien que está comenzando a improvisar?
Le diría que si le gusta hacer freestyle sigue haciéndolo. Sin importar el nivel que tenga, que rapee con quien quiera y como te salga, natural. Que nadie pueda decirle nada. Si tú rapeas porque te gusta da igual donde estés que lo vas a disfrutar.
Artículo redactado por Fernando Ruiz, miembro de la Urban Roosters Army.