Perú: una tierra diversa, llena de paraísos naturales, con una de las gastronomías más mágicas del mundo, una fauna y flora única en su especie y, por supuesto, una calidad artística gigante, algo que una disciplina como el freestyle rap demuestra.
En 2020, hace tres años, llegó a tierras peruanas una de las ligas más importantes para el rap improvisado. La Freestyle Master Series trajo consigo la profesionalización del free en el Perú, y hasta el día de hoy sigue dando de qué hablar alrededor del mundo. Para celebrar este aniversario, traemos algunos de los momentos más memorables de la competición a lo largo de estas tres temporadas. ¡Comencemos!

Primero que todo, la llegada de FMS Perú supuso la exposición del talento peruano mucho más allá de lo que ya había llegado. Si bien algunos representantes como Nekroos, Choque, Jaze, Jota y Stick estaban previamente consolidados, los demás competidores tomaron esto como una oportunidad para hacerse más conocidos aún; Vijay, Litzen, Strike, Skill y Ramset. Ellos, incluyendo a nuestros queridos Metz y DJ Dmandado, una dupla que le dió una cara más original a la liga, un punto diferencial del resto de competiciones. ¡Todos cumplieron y cumplen una función vital!
Desde la temporada 2020 hasta el sol de hoy, Perú ha llevado competidores a las esferas internacionales de FMS, dejando buenas vibras respecto al nivel de los MCs. Nos acordamos de aquel Nekroos contra Gazir en un duelo de titanes, o ese minuto de presentación de Jaze que sigue la línea de su estilo clásico. Y hablando de él…
Recordamos con cariño cuando Jaze, bicampeón de FMS Perú y vigente hasta culminar la temporada 2023, sacó a la luz su faceta musical trayendo a Toy Lokazo a los escenarios de FMS Perú. Le dió una identidad más propia a su personaje, y creó una atmósfera fresca que nos introducía una nueva etapa en su carrera, dando un punto de inflección para la liga. Aunque con este repersonificación, hay algo aún más memorable para el público del freestyle.
Cómo pasar por alto los minutos libres que Juan Carlos nos dejó casi que cada jornada. Un beat de doble tempo, en combinación de su voz llena de flow y métricas poco comunes e increíbles, era la fórmula de un minutazo que seguramente estaría en las recopilaciones de las FMS a nivel global. Esto le dió un impulso mayor a la liga, demostrando junto al resto de competidores que el nivel de Perú era algo más que palabras: los hechos hicieron lo suyo.

¡Feliz aniversario, FMS Perú! Una liga que ha supuesto la llegada de nuevas figuras a la élite del freestyle, y que ha terminado de consolidar a viejos conocidos en la escena que van cada día por más. Hay hambre de victoria, de disfrutar y de vivir el free, algo que veremos más que claro durante esta temporada 3.
