La jornada 4 de la FMS Argentina tuvo lugar el pasado 28 de noviembre. Una de las batallas más esperadas de la fecha fue la de Papo vs. Wolf, un duelo entre dos grandes freestylers de la vieja escuela que, desde un principio, nos prometió mucha agresividad.
El marplatense venía de unas fechas en las que dio muy buenas performances, ubicado en un cómodo segundo lugar de la tabla de posiciones y, como siempre, con mucha constancia jornada tras jornada. Para Papo, sumar los tres puntos significaría asegurar su lugar en FMS Internacional.
Por otro lado, el MC de La Paternal venía de una racha de sumar siempre puntos, ya sea con réplicas o de forma directa. Contaba como ventaja haber competido en la Batalla de los Gallos unos días atrás, en la cual quedó en el segundo lugar. Estaba más que claro que el actual subcampeón argentino iba a dar batalla.
Las provocaciones entre los MC’s no tardaron en llegar. Wolf dio comienzo a este duelo, y al cerrar su easy mode, soltó la siguiente barra que encendió a su oponente: “Voy a ganar porque yo lo quiero / No por el más tecniquero o el más rapero / Sino porque sé que lo deseo / La escrita nunca le gana al que está haciendo un rapeo”. Esa actitud combativa, fue tomada por ambos y se mantuvo durante todo el enfrentamiento.
Comentarios fuera de los patrones, acercamientos un tanto bruscos, una puesta en escena de ambos con mucha actitud y argumentos muy sólidos por parte de ambos, fueron algunas de las particularidades que tuvo la batalla fuera del formato. Ambos se metieron en el juego del otro y supieron sobrellevarlo y salir airosos a su manera.
Mientras que Wolf se centró mucho más en refutar cualquier ataque y sostener sus ideas, Papo, utilizó todas las herramientas que sabe manejar. Últimamente, es muy común ver a la ‘Bestia del Hardcore’ mucho más feroz al momento de contestar, herramienta que le juega a favor la mayoría de las veces, que en esta ocasión no fue la excepción debido a que el hermano Mansilla se plantaba y redoblaba la apuesta y, por consiguiente, aumentaba la intensidad en el ambiente.
El hambre y las ansias de ganar se notaron mucho más en Papo, quien lo dejó bien en claro en el 4×4 final: “¿Sabés por qué quiero los puntos? / Porque sé que hay gente en el ascenso que mataría por este asunto / ¿Sabés por qué quiero los puntos? / Porque hay gente que antes de no estar acá prefería estar difunto”. Contrario a este caso, Wolf dejó en claro desde su minuto de presentación que solo le importaba rapear y no pelear el pase a la internacional.
Ambos jugaron con el flow y utilizaron muchas técnicas a la hora de improvisar. La puesta en escena fue impactante, ambos lograron transmitir las emociones que sentían en el momento. La tensión resultó incluso confusa para los espectadores por la carga de adrenalina y la sensación de furia. Sin embargo, nada más alejado de la realidad, para ambos fue solo una batalla de freestyle en la que dieron todo de sí y tanto la actitud de ambos luego de revelar el ganador y los mensajes que se intercambiaron por redes sociales, lo demuestran.
Por si te perdiste este batallón, te cuento que el resultado final dio como vencedor a Papo con 341 puntos, el cual no solo fue el MVP de la fecha, sino que también clasificó a FMS Internacional por segundo año consecutivo y volvió a posicionarse como puntero de la liga (luego de ocupar el segundo puesto durante las últimas dos jornadas). Sin chance de sumar ningún punto en esta jornada, pero siempre mostrando una excelente performance, Wolf obtuvo 296 puntos y quedó en el séptimo puesto de la tabla.
Artículo redactado por Sofía Giménez, miembro de la Urban Roosters Army.