Por: Adrián Ruiz (@adr1_98)
Hay cosas en la vida que, por muy improbables que parezcan, acaban sucediendo. Todo llega, tarde o temprano, a un punto final. Sin embargo, previamente, ha debido de tener un inicio. En el mundo del freestyle no iba a ser diferente. Una disciplina como la nuestra se caracterizará, siempre, por la magia del momento. Todo puede pasar, hasta lo imposible. Un mundo en el que cualquiera puede ganar a cualquiera, incluso a aquellos que aparentan poseer un aura de invencibles, en ocasiones, también pueden sucumbir, como es el caso de Chuty.
Chuty comenzaba su andadura en el formato FMS allá por 2017, en la mítica jornada realizada en Barcelona en la sala Razzmatazz, con una victoria en la réplica contra Errecé. Tras una primera fecha un tanto titubeante, logró terminar la temporada de una manera impoluta: con siete victorias directas en sus siete enfrentamientos siguientes. De esta manera, comenzaba a surgir la concepción de que era imposible derrotar a Chuty en el formato FMS.
Todo ello se acentuaba con el inicio de la segunda temporada, en la que, tras cuatro jornadas, el madrileño seguía invicto. No fue hasta la jornada 5, realizada en Bilbao, cuando Blon logró el hito. Chuty cayó derrotado por primera vez en FMS ante una actuación sublime del catalán. Sin embargo, esta segunda temporada concluyó sin ningún tropiezo mas.
En la tercera temporada, Skone volvió a humanizar a Chuty. El malagueño necesitaba una victoria en la cuarta jornada para tener un puesto en el corte clasificatorio de la FMS Internacional, y lo hizo. Tras uno de los enfrentamientos más épicos en el formato, Chuty cosechó su segunda derrota.
Antes de la finalización de esta tercera temporada, Chuty volvió a conocer el amargo sabor de la derrota. En esta ocasión, fue en la gran final de la FMS Internacional, donde cayó eliminado frente a Aczino.
Tras este traspiés, y con su baja confirmada durante la FMS España en la cuarta temporada, nos situamos en la quinta y última edición de la liga española. En ella, encadenó diez victorias consecutivas, hazaña que le permitía llegar a la última jornada dependiendo de sí mismo para ser campeón. En ella, tenía que vencer a Gazir, pero, tras una apasionante réplica, fue el asturiano el que logró hacerse con el campeonato y, de esta manera, provocó la cuarta derrota de Chuty en el formato FMS.
Así, Chuty ha caído derrotado en cuatro ocasiones tras haber disputado un total de 42 batallas en FMS. Sin embargo, son números de leyenda, que no hacen más que aumentar el mérito de Chuty.
El hecho de haber cosechado solo cuatro derrotas nos puede llevar a sacar una doble conclusión: por un lado, alabar la inmensidad de Chuty y poner en relevancia todo lo que consigue día tras día y, por otro lado, se demuestra cómo los dioses también sangran. El freestyle es magia y cualquiera puede vencer a cualquiera. Es lo más bonito de nuestra disciplina.
